El tipo de cambio GBPUSD ha caído a sus mínimos de 2024 mientras los mercados se preocupan por el rumbo de las políticas en el Reino Unido.
GBPUSD – Gráfico diario
El precio de la libra esterlina frente al dólar estadounidense ha alcanzado el nivel de soporte clave de 2024, el cual ahora es crucial para el par.
La ministra de Hacienda británica, Rachel Reeves, fue instada a cancelar un viaje a China mientras intentaba calmar los mercados tras la caída de la libra y el aumento de los costos de endeudamiento del gobierno. La libra esterlina cayó el jueves al nivel más bajo frente al dólar en más de un año, mientras los inversores añadían un mayor riesgo a los bonos del Reino Unido (gilts). Los gilts son los bonos que utiliza el gobierno británico para financiar su deuda, y los precios más altos ejercen presión sobre los planes del gobierno.
Los economistas advierten ahora que el estancamiento del crecimiento del país y la persistente inflación dificultarán que la ministra de Hacienda equilibre las cuentas sin nuevos recortes de gasto o aumentos de impuestos.
Muchos recuerdan el desastroso mini presupuesto de la exministra Liz Truss en 2022, que provocó un aumento en las tasas de endeudamiento y le costó el puesto.
La actual ministra no asistió a la Cámara de los Comunes y envió a su adjunto para responder preguntas. Este intentó explicar el pánico del mercado señalando preocupaciones geopolíticas y de datos.
“Los movimientos del mercado financiero, incluidos los cambios en los rendimientos de los bonos gubernamentales o gilts, que representan los costos de endeudamiento del Gobierno, están determinados por una amplia gama de factores internacionales y nacionales”, dijo.
Sin embargo, los mercados están castigando a la moneda británica, ya que será necesario recortar las tasas de interés para estimular el crecimiento, algo difícil de lograr mientras la inflación se mantiene elevada. También existen temores geopolíticos, ya que la llegada del presidente de EE. UU., Donald Trump, podría tener un impacto en el país con la imposición de aranceles. Pero la realidad es que el presupuesto de octubre incrementó el endeudamiento para invertir en infraestructura y también realizó un importante aumento de impuestos a las empresas para financiar el gasto público.